lunes, 23 de febrero de 2009

Prehistoria de Internet en Argentina

Algo bueno que tuvo Ciencias Exactas en los ochenta era la posibilidad de tener un mail, hacer FTP y búsquedas por Gopher, y navegar a 4800 baudios por pantallas oscuras de instituciones académicas. Sonido: el chirrido del dialup al conectarse. Imagen: pantallas despojadas, texto blanco sobre fondo oscuro. Nada más. Con lo cual, cuando desembarqué en el negocio, Internet no me era ajeno. Léase, yo no era un genio, pero ya tenía mucha navegación encima, y al menos sabía quién era Jakob Nielsen. Entre paréntesis, el bueno de Jakob titula estos días "Mobile Web 2009 = Desktop Web 1998".

Alrededor del 95 se hizo la luz con Startel y floreció la web argenta, de un modo poco ordenado y algo más masivo. Los escasos clientes de Internet de por entonces accedían mediante las BBS pioneras (Los Pinos, Mainet, Satlink, Compuserve, etc) fueron comprados por los primeros ISP de entonces (Advance, Arnet, etc). Los contenidos eran mínimos, y como decía Jakob, ilegibles. El browser era el Netscape, el buscador era el Altavista y el primer messenger cool fue el ICQ (se ve que yo no era muy fanático de AOL). El día a día en el trabajo del ISP era así: reuniones con cientos de proveedores que ofrecían “cajas” para poder Internetear en la TV (algo que jamás anduvo) / reuniones para emprolijar sistemas (tortuosos comentarios sobre cómo se loggea un cliente / fricciones debido a reparto de clientes en unidades de negocios / asfixiantes abrazos amorosos de la Telco Madre enseñando cuál era el negocio / alarmante falta de conocimiento de propios y extraños: “servidor” y “proveedor” eran, fatalmente, sinónimos.

Los meses continuaban. Nunca hubo tanto laburo para tanta gente -eso tal vez explicó mi propia llegada-. Los ejecutivos de grandes clientes aterrizaban sus posaderas en mi cajonera, literalmente, para preguntarme cuándo iban a estar listas algunas cositas que les pedían sus cliente. Nimiedades como ADSL, "cosas que salen en un mes o dos" desde la visión comercial. Resultado: varias cajoneras abolladas -recuérdese que los ejecutivos de ventas provienen del rugby por una cuestión genética que no entenderé, tal vez el “push” de los negocios- y un diálogo al menos difícil. Vuelta de tuerca: el área técnica miraba a Mkt con la misma desconfianza con que nosotros en Mkt mirábamos a Ventas. "Primero seguricemos los fierros", nos decían.

Si el ‘98 fue el año de la conectividad donde los ISP grandes compraron a los chicos, el ’99 fue el año de los contenidos. Enumero: Olé (el "pelotazo" de Pep Vallés), Yupi y todo el narcolavado hecho bits, GauchoNet y Grippo entre los locales, y muchos etc. Poderoso caballero es don dinero: todo convergió en Terra, de algún modo, en la época en que Villalonga era rey en Miami. No estaba claro lo que era un portal, un buscador o un webmail (nosotros lanzamos el TopMail, por caso) pero el Santo Grial que se buscaba entonces era un atractor de visitas, fuese lo que fuese.

Hasta que estalló la burbuja. Allí los portales dejaron de valer, la última milla y el tener los clientes se volvió a cotizar bien, y los ISPs fueron integrados a las Madres Telcos.
Pero ésa es otra historia...

viernes, 13 de febrero de 2009

FB crece sobre las cenizas de los blogs

Según las últimas figuras expuestas por C-Net, Facebook lo está pasando a MySpace, ambos aún con bastante hegemonía en la cuestión 2.0. Lo segundo, uno de los responsables de este crecimiento son las "notas" de FB que son algo así como el reemplazo de los viejos blogs, según se aprecia en las columnas naranjas del gráfico.

El blog era un mensaje en una botella, lo lee el que quiere. Nadie que tenga buen tino arma un spam entre sus contactos para decir "lean mi blog". Sin embargo, las notas de Facebook pueden tener el atractivo de la rapidez y ser la antesala de un blog ("miren esto"), pero con esta contraindicación: muy pocas veces los usuarios filtran las acciones en FB (todos leen todo: familia, amigos, laburo). La mezcla de ámbitos -un hecho que me interesa especialmente- aparece otra vez en su máxima expresión.

Facebook siempre gana. Los comentarios se terminan realizando sobre la misma plataforma de Facebook, realimentando la viralidad inicial, y no ya en los blogs.Conclusión, para más de un convencido que el driver de Facebook es el voyeurismo de las fotos (que efectivamente son lo más popular, según los mismos usuarios!), parece que el motor del crecimiento actual de Facebook va de la mano de la muerte de los blogs.

lunes, 9 de febrero de 2009

HDTV

La gente está bombardeada por nuevos conceptos que a menudo no entiende. En este momento se escucha el término "HDTV." Pero qué es? O, afinando la puntería, la compra de un LCD de resolución 1024x768 es el fin del camino?

La respuesta es no. La resolución del ejemplo no encaja con el mínimo de 1280x720 pixeles exigido por el standard HD. En realidad hay tres variables a examinar, que son resolución, audio y capacidad de programación, pero la primera es la que constituye el mayor problema. La resolución es "cuánta información puedo mostrar en pantalla", que en el caso de la TV se traduce en "cuántas líneas", que yendo al caso específico de HDTV significa 720 líneas como mínimo (aunque hay posibilidad de llegar a 1080). De paso, esto explica la lenta extinción de los modelos de plasma, acotados en su mayoría a valores intermedios.

En otros aspectos, HDTV significa pasar de audio común mono o stereo al standard Dolby, y de una relación de pantalla 4:3 al nuevo standard Widescreen de 16:9. Además existe la posibilidad de interactuar con los contenidos mediante menúes emergentes ("pop-up") y cierta capacidad de programación como PVR ("personal video recording").

Esta oferta está surgiendo en Argentina de un modo tibio. Como ejemplo, Cablevisión ofrece tres canales HD, como lo son Fox, HBO y Movie City. En suma se requiere un LCD adecuado, un deco que vale unos 200 USD y el abono de un servicio premium. Es, en definitiva, un mercado de nicho sobre el que no hay pronunciamientos oficiales, por cuanto su vuelco al "mainstream" significaría tirar toda la base de receptores de TV existentes.