El concepto de MVNO (Mobile Virtual Network Operator) tiene una historia de unos veinte años, tanto en el seno tecnológico de la ITU como en ejemplos concretos a lo largo del mundo. El concepto es claro: brindar a un dado segmento un servicio de telefonía móvil pero sin gastar Capex en armar una red propia sino alquilando la red de un tercero. En términos marketineros, esto sirve si se tiene capacidad de impactar el mercado, si la marca vende por sí sola, si el segmento en cuestión es un target muy distintivo y si se tiene plata para tirar en modo OpEx.
El mejor ejemplo -del cual ya hemos hablado- es Blyk, en UK. Otros ejemplos surgen de ofrecer telefonía a una base de usuarios de ciertos contenidos como música: son los casos de Vivendi UMM y Virgin Mobile, en Francia y UK. La novedad es que en Argentina puede llegarse al primer MVNO de la mano de un acuerdo entre Telecom (dueño de la red) y las cooperativas Fecotel y Fecosur. Tiene sentido pues las cooperativas podrán ofrecer nuevos servicios a sus clientes, y Telecom se beneficia del arrendamiento de cuanto le sobre en términos de Red. Por otro lado los MVNOs surgen cuando el mercado móvil es maduro y cuando los incumbentes han invertido con holgura en la Red, y cualquier inversión extra de un tercer o cuarto competidor sería difícilmente recuperable.
Uds preguntarán... esto funciona? En algunos países hay muchos MVNOs, en otros países hay cero. En España y Austria el regulador europeo ha forzado la aparición de MVNOs, pero pueden sucederse conflictos a raíz de la vaguedad en la definición misma del MVNO (es quien no tiene red propia? es quien ofrece un servicio. El impacto inmediato en Argentina será excelentes perspectivas laborales para los estudios jurídicos especializados en servicios...